Enrique Maurer, director general ENAIRE: «Tenemos las tasas de navegación aérea más competitivas de Europa»

Dos días del verano de 2023 superaron el récord de vuelos registrados en España respecto a 2019. El sábado 22 de julio ENAIRE gestionó 7.499 vuelos, récord histórico en la, y el 12 de agosto, con 7.440 vuelos gestionados. Ese fue el escenario en el que se estrenó el nuevo director general de ENAIRE, con los retos de gestión que esta afluencia supuso.

Enrique Maurer es el nuevo director general de ENAIRE, el gestor de la navegación aérea en España. Se estrenó en el cargo en junio de este año -a las puertas de la época en que más vuelos surcan nuestros cielos-. Maurer, ingeniero aeronáutico por la UPM de Madrid, no ha vivido con sobresaltos este aterrizaje. Es un veterano de la empresa pública y formaba parte del equipo directivo del anterior director general, Ángel Luis Arias, quién abandonó el cargo para asumir el puesto de representante permanente de España en OACI.

Las cifras del verano confirman la recuperación  del transporte aéreo en nuestro país, con niveles superiores al año “dorado” para el sector, 2019, anterior al parón que sufrió la aviación a nivel mundial por la pandemia. Las cifras acumuladas durante lo que llevamos de año confirman la recuperación. ENAIRE gestionó más de 1,4 millones de vuelos (1.457.670) en los ocho primeros meses, lo que supone el 11,8% más que en el mismo periodo de 2022.

Este es el escenario en el que se ha estrenado el nuevo director general de ENAIRE, Enrique Maurer, que analiza en esta entrevista para Fly News los restos a los que se enfrenta uno de los líderes mundiales de la gestión de tráfico aéreo a nivel global.

P.- Se estrenó en el cargo en la época en la que más vuelos se registran en España, y por tanto no exenta de dificultades. ¿Qué valoración hace de estos primeros meses?

R.-  Ha sido un verano de récord. En 2022 ya tuvimos una temporada de verano con cifras de tráfico en algunas dependencias muy cercanas al 2019, pero este año hemos superado dos veces la cifra máxima de vuelos que teníamos desde el que es nuestro año de referencia prepandemia, 2019, con casi 7.450 vuelos gestionados en un solo día. Ello es síntoma de que la recuperación en España ha sido sostenida por parte de todos los actores que nos complementan: aeropuertos, las compañías aéreas, etcétera.

En julio hemos gestionado un 1,1 por ciento más vuelos y en agosto un 1 por ciento más que en 2019. En Europa, por comparación, están un 7 por ciento por debajo de 2019. Se puede decir, por tanto, que estamos 8 puntos por encima de las referencias europeas. Hasta el 31 de agosto estamos ya por encima del millón y medio de vuelos. 2019 lo acabamos con algo más de 2,1 millones, y este 2023 lo acabaremos rozando los 2,2 millones de vuelos, lo que hará que superemos 2022 en entorno a un 10 por ciento, y 2019 en un 1 por ciento. Y no solo el verano. Tenemos en España una tendencia sostenida de recuperación del tráfico aéreo.

Como siempre digo, una cosa es el tráfico y otra la calidad del servicio. Con respecto a esta, con nuestra referencia de 2019, y medida en términos de demoras atribuibles a causas de la gestión de ENAIRE, como capacidad, personal, fallos técnicos… hemos reducido las demoras un 34 por ciento con  respecto a 2019, a pesar de tener un tráfico ligeramente superior al de 2019. Y ello es una buena noticia y al final no deja de ser un buen trabajo de todos los profesionales de ENAIRE. También hay que poner en valor todas las medidas que tomamos durante la pandemia. Durante la misma, seguimos trabajando en proyectos estratégicos, seguimos reponiendo plantilla, impulsando los proyectos de re-estructuración de espacio aéreo, y las actividades de formación de nuevos profesionales. Creo que el éxito que hemos tenido ha sido no parar durante el COVID. Y el COVID nos ha enseñado a afrontar los proyectos con más resiliencia y robustez. También en verdad que estamos recogiendo ahora los frutos de nuestro plan estratégico, Plan de Vuelo 2025, y las medidas que todos los años tomamos para el verano con proyectos específicos. Creo que estos resultados, un 34 por ciento de menos demoras, significa que el plan ha funcionado.

Debo destacar que todo esto ha sido con una mayor eficiencia medioambiental. Al final, todos los proyectos que hacemos de espacio aéreo, y todas las reestructuraciones que llevamos a cabo buscan recortar las millas voladas, hacer un uso más flexible del espacio aéreo, y todo ello con el ánimo de reducir las emisiones de CO2, y el consumo de combustible. Lo bueno es que al final todo ese tráfico aéreo se ha gestionado con unas medidas de gestión medioambiental muy prometedoras.

P – Ha  hecho referencia a Plan de Vuelo 2025. ¿Cómo va?, ¿Qué hitos se van a cumplir en 2023 y cuál es el objetivo para 2024?

R.- Nuestro plan de vuelo es nuestra guía o brújula de donde queremos ir. Ahora mismo estamos justo en el ecuador, y creo que se han conseguido hitos muy relevantes. La seguridad, que aunque en todos los servicios que prestamos se da por entendido, nosotros la llevamos en nuestro ADN. Va a ser el tercer año consecutivo en el que vamos a ser el mejor gestor europeo a nivel de madurez del sistema de seguridad, con un 100%  de puntuación según una evaluación independiente, que indica que las medidas que estamos afrontando son eficaces.

«El reducir las demoras un 34 por ciento, con algo más tráfico que en 2019, es el resultado de muchas medidas del Plan de Vuelo 2025 que engloban los proyectos técnicos y de espacio aéreo y que están dando sus frutos.»

A nivel de competitividad hemos logrado poner nuestras tasas de navegación como las mejores entre los cinco grandes gestores europeos. Esto también ha sido una apuesta por la reducción de los costes de explotación y de la optimización de las inversiones. Durante el COVID no las paramos, pero hicimos una priorización de las inversiones estratégicas. Ello nos ha permitido, poco a poco, optimizar los costes y hoy somos el gestor más competitivo de los cinco grandes gestores europeos.

El Plan de Vuelo tiene una apuesta importante por la modernización tecnológica. Y ello está dando sus frutos. La inversión que estamos poniendo encima de la mesa en sistemas, de tráfico aéreo, pero también en digitalización, en virtualización, en resiliencia…. La resiliencia es nuestra capacidad de robustez, de ofrecer soluciones. Al final no podemos dejar de dar servicios, y tener una arquitectura redundante: centros de contingencia, emplazamientos alternativos, hemos invertido mucho en redes de datos con operadores de comunicaciones diferentes por si se hay incidencias en uno de ellos. Invertimos mucho también en tecnología.

Sobre los hitos futuros, el Plan de Vuelo tiene una impregnación paulatina de internacionalización. Poco a poco los servicios de navegación aérea, como en el resto de la sociedad, se han globalizado, ya no son servicios punto a punto, nacionales. Todos los servicios que damos ya son paneuropeos y mundiales. Los satélites hoy en día nos ofrecen soluciones en comunicaciones, navegación o vigilancia que son globales, lo que impulsa las alianzas a nivel internacional, como las que mantenemos a nivel de proveedores de servicios. Es el caso de Indra e iTEC con colaboración con Alemania, Reino Unido, Países Bajos, Noruega, Polonia y Lituania o nuestra pertenencia a la Alianza A6,. Al final invertimos de una manera conjunta, convergiendo en sistemas comunes a través del Grupo EAD o la ESSP, y en modelos  de operación común.

Destacaría todo lo que hacemos en proyectos de espacio aéreo en materia de procedimientos PBN, que se están traduciendo en una mejor calidad de servicio, más seguridad, perfiles de vuelo optimizados. La navegación que llamamos por prestaciones nos permite hacer diseños de procedimientos más óptimos desde el punto de vista del perfil de ascenso y descenso. Para las compañías aéreas esto se traduce en una reducción de consumo de  combustible, pero también de emisiones de ruido. Pero sobre todo nos permite hacer rutas más flexibles y cortas.

Estamos impulsando también la cocoperación civil y militar, con la creación de una dirección dedicada a reforzar la misma. El espacio aéreo es de todos, y la colaboración con el Ejército del Aire y del Espacio es fantástica. Pero lo es porque tiene que ser así. Es la única manera de hacer un uso flexible del espacio aéreo en función de lo que necesitamos cada parte en cada momento. Estamos siendo un gran ejemplo de trabajo en equipo,  que está dando sus frutos con lo que llamamos “free route”, cuyo nombre no indica que cada avión vuela por donde quiere. Es un nuevo concepto de vuelo en el que con una serie de puntos de entrada y de salida en el espacio con unas ayudas de sistema para los controladores, podemos ofrecer rutas más cortas y atravesar zonas que antes teníamos que evitar.

También tendremos la entrada de nuevos usuarios. El espacio aéreo, tal y como lo conocemos tiene una serie de capas. Y ahora se ha empezado a llenar la capa baja, con drones, pero empieza a llenarse en la capa alta con una gestión de tráfico espacial, con misiones tripuladas, lanzamientos y otras  iniciativas. Y nosotros tenemos que estar ahí. También hay iniciativas potentes con la aviación no comercial y deportiva. España es un país que ofrece unas condiciones meteorológicas excepcionales para la aviación general, y creo que nuestro compromiso con todos nuestros clientes y grupos de interés se muestra con la apuesta por la ayuda a la aviación general en lo que podamos.

P – Ha hecho referencia al trabajo en equipo y el personal. Una de las últimas medidas de su antecesor fue firmar el convenio colectivo con los controladores. ¿Esta paz social garantiza el cumplimiento del plan estratégico y de los objetivos? ¿Ha servido para aumentar la eficiencia y dar un mejor servicio en verano?

R.- Efectivamente, para nosotros ha sido un hito la firma del tercer Convenio Colectivo de control. Tiene un gran valor para todos, porque ha sido el fruto de mucho trabajo y mucho diálogo. Y las cosas que tienen diálogo son buenas. Partimos del convenio previo, que se había hecho en 1999, hace 24 años, y creo que el convenio logrado es bueno para ambas partes, aporta estabilidad. Creo que es bueno para cualquier colectivo que haya esa estabilidad. Pero no me atrevería a decir que los hitos del Plan de Vuelo 2025 se vieran comprometidos  o no por el convenio colectivo, porque ya estábamos cumpliendo con los hitos recogidos en el plan, porque todos nuestros profesionales en el ámbito del control, la verdad, ya estaban dando un servicio excelente. El convenio regula un marco laboral. Pero es cierto que todo convenio es fruto de un acuerdo y los acuerdos, evidentemente, nos permiten un marco de estabilidad. Y aquí también creo debo agradecer mucho la colaboración y la participación de muchas personas y el compromiso de los representantes sindicales. Ahora estamos con el convenio del resto del personal que no es controlador, y esperamos poder culminarlo también en  corto plazo.

P- El anuncio del MITMA de privatizar otras siete torres de control, ahora paralizado, creó incomodidad en ENAIRE, pudiera parecer que se va perdiendo parte de la esencia de la organización.

R.- Al final, nuestra misión como ENAIRE es dar el mejor servicio en todas las dependencias. Es obvio que para nuestro personal  cualquier medida que signifique la pérdida potencial de la prestación de un servicio, o de una dependencia choca con su objetivo de mantenerlo y prestarlo con la mejor calidad posible. Dicho esto, somos una entidad pública que dependemos de las decisiones, como no puede ser de otra manera, que en cualquier momento pueda adoptar el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. En este caso, estamos ante un proyecto de Orden ministerial, que nuestro Ministerio consideró oportuno someter a un proceso de consultas para que todos los grupos de interés den su opinión. Este proyecto tuvo unos plazos para los comentarios, y entiendo que es lo que han hecho todos los que han querido opinar. Nosotros, en nuestra función de asesoramiento, hemos dado nuestras opiniones tanto en cuestiones técnicas, como operativas. Es por tanto, competencia del Ministerio valorar todas las opiniones recogidas en el proyecto de consulta y tomar las decisiones que competan.  Nosotros, como siempre, estaremos ahí para asesorar y dar el mejor servicio.

P- Sobre el  Cielo Único Europeo, y las quejas de las aerolíneas de disminuir los tiempos y los retrasos. ¿Cuál es la dificultad para que no se acabe de implementar?

R.- Nuestra apuesta y la del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana es la de trabajar con ahínco en el Cielo Único Europeo. Es una herramienta, una palanca, que busca romper esa fragmentación que tiene Europa y que afecta a otros ámbitos sociales. Al final el Cielo Único tiene componentes técnicas en las cuales la virtualización, las arquitecturas compartidas, el estar en alianzas entre sistemas son vectores muy importantes para conseguir el objetivo final de converger en la utilización de sistemas comunes desde el punto de vista de la regulación.

Se trabaja para que al final Europa se pueda comportar, en cierto modo, como una red unida de espacios aéreos. El problema es que los Estados tendemos, y es lógico, a proteger nuestro espacio aéreo, la soberanía de nuestro espacio aéreo, que tiene también una componente de defensa y de gestión nacional. Esa preocupación natural de que las fronteras terrenas se extiendan al cielo, actúa como barrera. Debemos poco a poco suavizar esas barreras, y eso es lo que estamos haciendo.

¿Queda mucho trabajo? Sí. Hay que trabajar en reglamentos de formación comunes, en reglamentos de actividad y descanso homogéneos, etc. El Cielo Único Europeo es una apuesta en la que todos tenemos que trabajar de forma intensa y creo que se están haciendo muchísimas cosas.. Por ejemplo, nosotros estamos trabajando ahora con las interfaces con Francia y Portugal. Tenemos ya “pequeños cielos únicos” con nuestros colaterales, y creo que en esa línea poco a poco irá llegando a todos los países.

P.-  ¿Puede ser una oportunidad para empresas españolas?

R.– Si, claro. Siempre lo digo, como proveedor de servicios la responsabilidad que tenemos con la sociedad hace que también seamos un tractor de la industria. Y por supuesto de la industria nacional con mayor razón. Indra por ejemplo es un referente mundial gracias en gran parte a la entonces Aena y a ENAIRE. Al igual que con Indra, tenemos asociaciones con empresas público-privadas en modelos que están siendo casos de éxito. Por ejemplo que en una organización como iTEC, sea el socio tecnológico, con dos países tan importantes en sistemas como Alemania y Reino Unido, es un referente muy importante también para ellos a nivel mundial.

«En los primeros ocho primeros meses del año hemos dejado de volar unos 384.000 kilómetros, con más tráfico aéreo, lo que equivale a casi a  diez vueltas a la Tierra. Cuando lo pasamos a toneladas de CO₂ emitidas, nos encontramos que hemos reducido en 7.200 toneladas esas emisiones.»

P.- ¿Qué está haciendo ENIARE para contribuir a la sostenibilidad en el transporte aéreo?

R.- Estamos en un mundo donde la lucha contra el cambio climático es un compromiso que todos tenemos que afrontar, y nuestro Plan de Vuelo 2025 se impregna de sostenibilidad como no puede ser de otra manera. Tenemos muchas iniciativas en Green Sky. En ella hay una parte en la que abordamos las emisiones a la atmósfera, con la implementación de rutas más directas, que para las compañía aéreas significan un importante ahorro de combustible, al disminuir el número de millas voladas.

 Luego hay toda una serie de medidas en los proyectos que acometemos de espacio aéreo, en las cuales, especialmente en el entorno aeroportuario, siempre trabajamos bajo la coordinación del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico en lo que son diseños optimizados desde el punto de vista de hacer lo máximo posible de evitar el ruido en el sobrevuelo de poblaciones. Hay aeropuertos más fáciles y más difíciles por la densidad de población.

Y luego tenemos toda una serie de iniciativas nuestras que llamamos EcoEnaire, que abarcan desde la electrificación de nuestra flota de vehículos, o la instalación de plantas fotovoltaicas en todas nuestras instalaciones para autoconsumo.

Solo con las medidas de Plan de Vuelo 2025, en los primeros ocho primeros meses del año hemos dejado de volar unos 384.000 kilómetros, con más tráfico aéreo, lo que equivales casi a  diez vueltas a la Tierra. Cuando lo pasamos a toneladas de CO₂ emitidas, nos encontramos con que hemos reducido en 7.200 toneladas esas emisiones. Esto es solo un parámetro de lo que podemos hacer en temas de medioambiente.

P.- ¿Qué papel tendrá la inteligencia artificial en el futuro de la actividad?

R.- La inteligencia artificial la estamos incluyendo ya en dos planos: en todas nuestras iniciativas de innovación y en el uso del big data. ¿Por qué? Nosotros manejamos muchísimos datos, y cuando tienes muchísimos datos, la inteligencia artificial y el uso del big data nos permite crear algoritmos que nos permiten tomar decisiones. Por ejemplo, hacer predicciones del tráfico aéreo es ahora mucho más difícil. Después de la pandemia el comportamiento de los flujos de tráfico ha cambiado bastante. La demanda de vuelos ha cambiado. Han cambiado las rutas. También la invasión de Ucrania ha alterado todo el espacio aéreo europeo. Los precios del combustible están también fluctuando, lo que afecta a las previsiones.

Tenemos varias herramientas creadas bajo algoritmos para prever lo que nos va a venir. Es como una “termomix” de datos, de donde después sacamos un producto. En seguridad operacional estamos con modelos predictivos en los que analizamos nuestros sucesos de seguridad. De cada uno tenemos muchos datos: La edad de la persona, la formación que tiene, si venía de otra dependencia,… Todos los datos los analizamos y procesamos y sacamos consecuencias. Creo que la inteligencia artificial va a revolucionar la navegación aérea. Lo que pasa es que siempre considero que la tenemos que utilizar con la prudencia y bajo el prisma de lo que es, un algoritmo,  pero debe también considerarse el factor humano y el interface hombre-máquina. Debe ser una ayuda, las máquinas no pueden pensar por nosotros. Las cosas las debemos hacer desde el punto de vista de que la persona, el experto, debe usar los datos y entenderlos.

Al final el ser humano tiene mucho miedo de si la tecnología nos va a suplir. Creo que el factor humano en nuestro negocio no sólo es que sea importante, si no que cada vez va a ser más relevante. Otra cosa es el rol que tenga el factor humano en el futuro. Será un rol más de supervisión, menos ejecutivo, más de planificación. Todos los sistemas están evolucionando mucho hacia la resolución de conflictos. Pero el ser humano, la persona, al final tiene que estar ahí ya que es al final el que toma la decisión. Ese factor humano para mi es esencial.

P.- Para terminar ¿A qué otros retos se enfrenta ENAIRE?

R.- Los retos a los que nos enfrentamos en ENAIRE son los mismos de nuestros homólogos de otros países. El tráfico aéreo tiene ya una clara senda de recuperación, los gestores del espacio aéreo tenemos que estar preparados para dar capacidad y eficiencia. Ello supone que tenemos que seguir poniendo en valor a nuestras personas, y a nuestros proyectos técnicos y operativos para adaptarnos y disponer la capacidad que necesite la demanda.

Pero hay algo que ha cambiado respecto a 2019. La demanda ya no es plana como entonces. Ahora es muy volátil, los flujos han cambiado. Las tendencias han cambiado. . Las preferencias han cambiado. Todo ello hace que la capacidad la tengamos que poner en servicio de una manera más flexible y dinámica, más adaptada a lo que necesita el usuario, y eso es distinto a hacer las cosas de manera rígida. La resiliencia, la robustez, el que seamos contingentes, al final es un reto que ha venido para quedarse. Cuando tienes poco tráfico, si se cae un sistema el impacto es bajo Cuando hay mucho tráfico, la afectación que causas es mucho mayor. Para mí, ser robustos es un reto muy importante.

Y hay otro reto para nosotros de primer orden: La ciberseguridad. Cuando estás en el mundo del software, de la virtualización, existe el riesgo de la exposición a ataques de ciberseguridad. Por eso estamos tomando medidas muy potentes en ciberseguridad. Es una amenaza que no estaba tan presente hace unos años.

Y por supuesto, aunque ya lo hemos comentado, el gran reto de la sostenibilidad ambiental. No es que haya venido, es que debe  quedarse. Creo  que cada año tendremos que hacer algo más por el medioambiente. Y eso a nosotros nos hace tener que estar en un equilibrio entre gestionar más tráfico, pero a la vez ser más sostenibles. Ese equilibrio es un reto que no es sencillo.

Después está el reto de coste-eficiencia. Cada día tenemos que ser más competitivos en costes, en eficiencia y calidad de servicio. Y ese reto es importante. Al final tienes que fortalecer inversión en proyectos estratégicos pero debemos reducir los gastos, y este reto al final te permite dar servicios competitivos y tener las tasas como las tenemos, de las más competitivas de Europa.

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DESPEGA LA CITA MÁS IMPORTANTE DEL CONTROL AÉREO: AIRSPACE INTEGRATION WEEK

ENAIRE es uno de los patrocinadores del evento, conscientes de la importancia de la cita como escaparate mundial de la empresa pública y por ende, de la industria española.

Según Enrique Maurer: “Para nosotros es un orgullo que España cuente de nuevo con un evento de estas características. Ya hemos sido pioneros de eventos de gestión del tráfico aéreo durante muchos años, y es un orgullo para nosotros que se haya decido apostar por España a través de este evento en Madrid”.Es un congreso que tiene mucho valor porque reúne a todos los actores que forman parte de nuestro día a día. Las áreas que vamos a ver incluyen la gestión del tráfico convencional, lo que llamamos ATM. Pero también habrá una parte muy importante de toda la coordinación civil-militar, la gestión del tráfico espacial, y junto a Expodrónica, toda la parte de gestión de drones, de nuevos usuarios. Además, el estar arropados por la industria española e internacional, colaboradores, proveedores, y socios, es una oportunidad excelente para hacer trabajo en equipo. También vamos a celebrar en ese entorno nuestra jornada anual de clientes. Entendemos que mucho de nuestro éxito es fruto del trabajo en equipo. Y en estos encuentros se ponen en valor tambien muchos proyectos también de manera conjunta. Son eventos muy importantes para nosotros y por ello tendremos un stand potente junto a INECO y SENASA, donde tendremos muchos productos y servicios 

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